viernes, 25 de abril de 2014

No es un adiós, es un hasta pronto

¡Buenas tardes! ya desde España...

Como os prometimos aquí tenéis nuestra última entrada, donde os queremos contar nuestros últimos días en la Fundación. Ya os adelantamos que la última semana iba a estar repleta de actividades y así fue.

El jueves comenzó con un curso para los encargados y encargadas de la Fundación. Trataba sobre el trabajo en equipo y la confianza; por eso les pusimos a imitar animales para que se soltasen un poco, además de proponerles una dinámica de grupo donde debían dar la vuelta a una manta sin salirse nadie de ella. La verdad que les resultó bastante útil tanto para el trabajo (eso nos comentaron después) como para lo personal ya que las risas estuvieron presentes.

El viernes, tal y como os dijimos, se hizo una venta de garaje para recaudar fondos y ahí que nos plantamos nosotras para ayudar en lo que hiciese falta: de dj's, de vendedoras o con las chicas mayores en la carretera pidiendo colaboración a los coches que iban pasando. Lo pasamos muy bien, además de perder la poca vergüenza que nos quedaba.

Para el sábado preparamos entre todas las voluntarias una mini-olimpiadas, donde los chicos y chicas pudieron practicar deporte, además de intentar fomentar el trabajo en equipo, y la verdad sea dicha ¡lo hicieron muy bien!
Se lo pasaron fenomenal y nos pedían más actividades, aunque por el tiempo no pudieron realizarse;  se les veía muy motivados y participativos para que su equipo fuese el vencedor.

Aunque hubo equipo vencedor, todos recibieron su medalla por participar y divertirse. ¡Algunos incluso no se la habían quitado cuando nos fuimos!



El domingo fue más tranquilo, pero no por eso menos divertido. Para el concurso de talentos, los más pequeños prepararon bailes, poesías y canciones que nos encantaron, aunque como teníamos que hacer de jurado para repartir los premios no pudimos ponerles un 10 a todos como nos hubiese gustado. Además tuvimos una incorporación al concurso de última hora; hermana Elma salió a bailar con Esperanza y la verdad que nos sorprendió bastante lo bien que se mueven juntas y el ritmo que llevan. ¡Una muestra más de que por muchas dificultades que nos ponga la vida podemos superarlas!

El lunes fue el día más difícil, ya que por la noche estaba programa nuestra despedida con nuestros niños y niñas. Pero antes de eso, nos volvieron a sorprender con toda su alegría y desparpajo en el desfile de moda que hubo por la mañana, en el cual participamos con mucha alegría, viendo a nuestros niños y niñas más cambiados que nunca, y algunas imitaciones exactas de los encargados. ¡Unos modelazos!






Para la despedida preparamos unas sorpresas a los pequeños y pequeñas, cartas, un video con las fotos que nos habíamos hecho con ellos, y lo que sabíamos que más les iba a gustar: ¡una fogata con nubes y chocolate!
Sin embargo, una vez más, fueron ellos y ellas quienes nos sorprendieron a nosotras. Habían preparado unos bailes y unas canciones para que, si ya nos iba a resultar imposible olvidarles, con eso más todavía.




















La noche acabó con lágrimas, como era de esperar, pero lágrimas de alegría por haber compartido con todos ellos tantos momentos especiales que tanta felicidad nos han aportado y nunca olvidaremos.

Pero todavía nos quedada un día más para disfrutar con nuestros niños y niñas y fue  en las piscinas. No nos encontrábamos muy bien como para bañarnos y disfrutar con todos ellos, pero solo verles la cara de felicidad y como lo estaban disfrutando nos valió.
Como os dijimos para nuestra última noche en la Fundación estaba programada una sorpresa para los y las mayores que no dejó indiferente a nadie... ¡una casa del terror!
Entre todas las voluntarias preparamos los decorados y los personajes para que pasasen una noche increíble, y creemos que lo conseguimos, no hubo nadie que saliese como si nada hubiese ocurrido...los hubo que se rieron, otros que gritaron (algunos más y otros menos) y quien se tuvo que salir antes del miedo (esa no era nuestra intención ni mucho menos). ¡Pero lo importante es que todos lo pasaron genial!




















Y llegó el día...el miércoles por la mañana partimos rumbo a Ciudad de Guatemala para hacer noche allí y al día siguiente coger el vuelo para volver a casa; no sin antes volver a despedirnos de los niños, niñas, encargados y encargadas de la Fundación y volver a caer en el llanto.

En Guatemala nos esperaba Mimi, una conocida y gran persona que nos acompañó en nuestro último día en Guatemala y nos atendió y acogió en su casa como si fuésemos parte de la familia. Por la mañana después de un desayuno muy completo y delicioso pudimos ver algunas zonas de Ciudad de Guatemala en plena Semana Santa. Fue una pena que el tráfico no nos dejase conocer a más familia porque sin duda serían encantadores conociendo a los padres, mil gracias por todo.

Y después de un largo viaje y algunos problemas técnicos del avión que casi nos deja en tierra (ahora no sale al vuelo, ahora al final sí sale...) llegamos a casa para reencontrarnos con nuestras familias.

Una vez en casa no queremos otra cosa que agradecer a todos los miembros de la Fundación, mayores y pequeños, por habernos acogido durante estos dos meses de forma tan maravillosa, habernos dejado conocerlos y habernos dados tantos buenos momentos.
Llevamos ya una semana en casa y ni os imagináis lo mucho que os extrañamos, y os extrañaremos siempre, porque habéis marcado con vuestra amabilidad, confianza y respeto, un antes y un después en nuestra vidas. ¡Muchas gracias por todo!

Y como dice el título de esta última entrada...esto no es un adiós, sino un hasta luego, porque los adiós cierran puertas, y nosotras no queremos cerrar esta ¡nunca!

¡Un saludo y hasta pronto cuates!



miércoles, 9 de abril de 2014

Penúltimas pisadas...

¡Buenas noches chapinas!

Estas últimas semanas han estado llenas de reuniones, cursos, informaciones, actividades y viajes, pero vamos poco a poco…

Los últimos días de la semana de nuestra última actualización estuvieron marcados por el teatro. Acabamos el guión con la participación de Wilder y Miguel que iban dando ideas; la verdad que estos chicos, con un poco de ayuda,  ¡tienen una imaginación asombrosa!
Una vez acabado repartimos a cada uno de los actores y actrices sus papeles, y ahí comenzaron los problemas… ¡Es imposible juntar a todos los chicos y chicas para los ensayos! Tienen diferentes tiempos libres, y quizá el “ahorita mismo voy” también influya cuando se podrían cuadrar horarios...
Por ello, desde las altas esferas, han decidido cambiar la fecha de estreno para principios de mayo, para que la obra les salga perfecta y puedan recaudar muchos fondos y que puedan realizar muchísimas actividades. ¡Es una lástima que no estemos ya en la Fundación para esas fechas para verles actuar!, pero sabemos que con ese tiempo de más les saldrá estupendamente y merece la pena el retraso de la fecha.


Para el sábado estaba previsto preparar los decorados y ensayar, pero por falta de coordinación, antes de comenzar nuestra actividad llegó un voluntario externo a la Fundación y comenzó a realizar actividad con los niños y niñas. Una de ellas era ir al campito con las bicicletas y juego libre. Volvieron a demostrar una vez la imaginación que tienen, ya que con su corta edad se prepararon unos columpios con telas y unas “bicimotos” con botellas en las ruedas de la bici para simular el efecto del tubo de escape, que hicieron que disfrutaran aun más del buen tiempo que hacía y del aire libre.
















La tarde de ese día también estaba ocupada por otras actividades asique la aprovechamos para ir a comprar lo necesario para la “fiesta española” que nos esperaba por la noche. Gracias de nuevo a la amabilidad de Pancho,  que nos prestó su casa, pudimos pasar una noche cultural y muy divertida donde les presentamos la tortilla española, los rebujitos y música española de todo tipo.

Para el martes estaba previsto el curso de capacitación con las teachers, pero cuando llegó la hora no vieron y al llamarles vimos que muchas ganas no tenían de venir, asique decidimos tomarnos la tarde libre y salir de la Fundación ya que el tiempo empezaba a pesarnos y necesitábamos desconectar. Vero aprovechó para ir con Celia al Museo Café donde pudo disfrutar de un rico chocolate en un jardín muy relajante.
Sara se fue con Vicky, Sofi y Leti a ver una ruta del café, intentaremos subir fotos en la próxima entrada.

El miércoles fue día de reunión con Mireia, donde comentamos nuestras impresiones sobre las prácticas y nuestro trabajo aquí. La verdad que nos sirvió para desahogarnos y que comprendieran la manera y el porqué de nuestra forma de trabajar ya que como hemos dicho, el tiempo va pesando y necesitamos comentar ciertos temas que nos preocupaban.
Ese día también estuvo marcado por el futbol, ya que el Huehueteco volvió a invitar a los niños y niñas de la Fundación, como en todos los partidos hubo cosas no educativas pero pudieron ver el duro entrenamiento del equipo y la compenetración entre los jugadores.

A pesar de que la noche anterior nos dormimos un poco tarde debido al partido, el jueves nos levantamos con energía para reunirnos con todos los trabajadores y trabajadoras de la Fundación para comentar puntos de vista y conocer mejor cómo trabajan para iniciar el curso de formación que nos pidieron Carmen y Flor para ellos.

Por la tarde no paramos, tuvimos la penúltima sesión del curso con las teachers. Tuvimos ciertos problemillas para realizarlas ya que era una sesión complicada de entender y si lo sumamos a que no dominamos el inglés y ellas no dominan perfecto el español, además de que llovía muy fuerte y no nos podían escuchar muy bien, os podéis imaginar cómo fue. Pero al final con empeño e interés por ambas partes logramos entendernos.

Y para el viernes más reuniones. Esta vez tocó con Carmen y Flor para comentar las actividades para Semana Santa y un poco ponernos al día, ya que sí saben todo lo que nos ha ocurrido con el colegio y esas cosillas que ya os hemos ido comentando, pero no lo habíamos hablando directamente.

Con el fin de semana llegó lo mejor… ¡nuestro viaje al Lago Atitlan!
Marchamos temprano rumbo a Panajachel, por unas carreteras que nada tienen que envidiar a las montañas rusas de los parques de atracciones.
Primero hicimos trasbordo en Cuatro Caminos, un intercambiador igualito que Avenida de América o Plaza Elíptica como podéis ver en la foto.



A pesar del caos logramos encontrar cual era el bus que nos llevaba a Panajachel. Y una vez allí, después de reponer fuerzas en “Pollo Campero” fuimos en busca de un sitio donde pasar la noche.
No podíamos haber elegido mejor, el Hospedaje Santo Domingo nos ofreció la paz y tranquilidad que necesitábamos para desconectar y relajarnos con sus jardincitos donde estábamos como reinas.
















Después de instalarnos nos acercamos a conocer el lago y sus volcanes, pero la niebla del día no nos dejo verlos, aun así ¡el paisaje es espectacular!

















También aprovechamos para hacer nuestras primeras compras e ir aprendiendo el arte del regateo.





Después de un día largo fuimos a cenar al restaurante de la hermana de Margarita, que para qué cambiar si con esa familia nos sentimos como en casa J, donde nos ofreció una excelente pizza para reponer fuerzas.



El domingo por la mañana pusimos rumbo a Chichicastenango para visitar, según dicen la mayoría de guías de viaje, el mayor mercado de Guatemala, y ¡la verdad que no se equivocan! Hay puestos para todos los gustos y si no quieres puestos también tiene venta ambulante que según te ven te van siguiendo para que les compres algo.
















Después de una mañana de compras y regateos volvimos a Pana con la intención de agarrar una barca que nos llevase a San Pedro de la Laguna; sin embargo el mal tiempo y la lluvia impidió que fuéramos. Pero sin pena, como aquí dicen, porque nos quedamos en nuestro hotel-oasis una noche más disfrutando de la tranquilidad y de un largo paseo por los alrededores del lago, que una vez más estaba nublado y no pudimos ver los volcanes, pero sí de un atardecer peculiar.























El lunes por la mañana partimos rumbo a la Fundación cargadas de energía para afrontar nuestros últimos 10 días.
Una vez instaladas de nuevo, una de nosotras partió rumbo al centro, junto con Sofi y Celia y algunas chicas más de la Fundación, para acompañar a Tino a por sus nuevos zapatos y zapatillas acompañados de sonrisas.

Por último, ayer lo pasamos dando los últimos retoques a la última sesión del curso de capacitación con las teachers. Por ser ya el final, pensamos que una reflexión sobre el curso vendría bastante bien tanto para su trabajo como para el nuestro.
Después del curso les hicimos una serie de preguntas para esa reflexión, y la pregunta clave era su opinión sobre nosotras y la información que les hemos ido dando. La verdad que estamos muy contentas, ya que todas nos daban las gracias por la información que les hemos ido ofreciendo, y valoraban nuestro esfuerzo para preparar las sesiones. Y como no hay nada mejor que te valoren un trabajo y que éste haya servido para la mejora, y más si se trata de la educación de menores, ¡no podemos estar más contentas!
Para cerrar el día de ayer, fuimos las seis voluntarias españolas a cenar a la “Mansión del taco”, que nos habían hablado muy bien de ella y ya teníamos ganas de conocerla. Razón tienen quienes la recomiendan, ya que cenamos muy bien a poco precio. Además de pasar un rato muy agradable todas juntas.



Para cerrar esta entrada queremos haceros un adelanto de todas las actividades que están programadas a partir del viernes para que los chicos y chicas de la Fundación disfruten de las vacaciones de Semana Santa. El viernes nos espera una venta de garaje para recaudar fondos; para el sábado están programadas unas mini olimpiadas, con entrega de medallas incluidas; domingo y lunes va de concursos: de talentos y de moda; y nuestro último día en la Fundación no iba a ser tranquilo ni mucho menos: piscinas y una sorpresa que les tenemos preparados para después de la cena.
Como veis, aunque sea nuestra última semana no vamos a estar ni un momento quietas, ¡ni queremos estarlo, ya que queremos exprimir estos últimos días al máximo!

Intentaremos contaros como han sido todas estas actividades antes de marcharnos de Guatemala si logramos sacar un ratito libre para escribir; hasta entonces….

¡Un saludo cuates!






miércoles, 26 de marzo de 2014

El tiempo pasa y ¡nosotras no paramos!

¡Buenos días desde Guatemala!

Tras un tiempo sin informaros aquí tenéis nuestras últimas noticias…
Anteriormente os adelantamos sobre nuestra obra en el área de reforzamiento, pues bien, como toda buena obra española ya ha sufrido un parón antes de comenzarla, debido a ciertos problemas técnicos. Esperamos que antes de nuestra marcha podamos realizarla y dejar esa área apta para el aprendizaje de los kínder y párvulos.

Los últimos días laborables de última semana en la que actualizamos este blog, los dedicamos a nuestra nueva planificación escolar; la cual incluye comunicación vía mail con los profesores guatemaltecos y cursos formativos dos veces por semana dentro de la Fundación con los profesores norteamericanos para enseñarles recursos y materiales para sus clases; además de diferentes actividades para los chicos de la Fundación los fines de semana. También tuvimos la reunión semanal con Mireia para organizar todos nuestros planes.
Queremos destacar que el miércoles fuimos con Carlos a la casa de unos amigos suyos para disfrutar de una estupenda cena que nos prepararon con pasta y una compañía inmejorable. ¡Muchas gracias chicos por vuestra hospitalidad!

El sábado esperaba a los chicos una gran guerra de agua para la cual debían pasar por diferentes pruebas antes, a modo gymkana, para acumular globos que usarían en la guerra final. Fueron separados por grupos para pasar por las diferentes pruebas, pero la idea era que se divirtiesen y calmasen un poco el calor que empieza a hacer, así que no consistía en que quedase un equipo vencedor, sino que todos lo pasaran en grande.
Aunque nosotras estuvimos de monitoras en diferentes pruebas lo pasamos igual de bien que ellos y acabamos igual de bañadas.

Aquí os dejamos las pruebas de lo bien que los pasamos todos, pequeños y mayores también.



















Y después del cansancio del sábado, el domingo no lo usamos para descansar, sino para hacer, entre todas las voluntarias, Mireia y muchos niños y no tan niños de la Fundación, las tortillas de patatas que tanto nos pedían los chicos. Nos dividimos en equipos para realizar los diferentes pasos que lleva la elaboración y únicamente decir que ¡en la vida nos imaginamos que íbamos a pelar tantas patatas!
Nos fuimos con los chicos al campito para que disfrutasen del juego al aire libre, agarrando moras y columpiándose de los árboles, y cuando terminaron de hacer las tortillas pudieron reponer fuerzas con ella rodeados de la naturaleza.

















El lunes lo dedicamos a trabajar con los chicos a la hora de reforzamiento para ayudarles a preparar sus exámenes. Una tarea bastante difícil ya que como es normal son niños y lo de estudiar les apetece más bien poco. Para motivarles un poquito a estudiar se les preparó una actividad diferente a la que están acostumbrados para que pensasen que era un juego y aprendiesen sin darse cuenta.

El martes tuvimos la primera reunión con los maestros norteamericanos y parece que les interesó y gustaron bastante los recursos que les ofrecimos ya que nos pidieron más para futuras reuniones.
Por la noche nos invitaron a casa de un antiguo trabajador de la Fundación a cenar y charlar un rato. Una de nosotras se quedo en la Fundación en soledad ya que echaba de menos escuchar el silencio y la otra sí se fue con todas las voluntarias a disfrutar de esa cena. Todo hay que decirlo una casa preciosa, con un patio “andaluz” lleno de luces y flores.
Os proponemos un juego y así animamos un poco el blog con vuestros comentarios. ¿Quién de nosotras dos se quedó y quien fue la que se unió a la cena? chan chan chan…

El miércoles lo utilizamos como día libre, y no podíamos dejar de ir al Megapaca. Megapaca es una tienda inmensa donde venden ropa importada de diferentes marcas, a unos precios increíbles. ¡Todavía seguimos alucinadas de todo los que hemos comprado a un precio tan bajo!
Para reponer fuerzas después de las compras hemos probado por fin los helados (Sarita!) que tanto vemos anunciar por la calle. Solo una palabra ¡buenísimos!

El jueves estaba previsto seguir el curso de formación con los teacher, pero al final no pudieron venir y decidimos ir con los chicos a reforzamiento. Ese día tocaba prueba de matemáticas y les estuvimos ayudando con las sumas y multiplicaciones.

El viernes fue un día tranquilo para los alumnos del Colegio Esperanza ya que no tuvieron clase, además por la tarde tampoco tuvieron refuerzo porque vieron unos skaters para hacer una demostración.

¡Y con el fin de semana llegó la diversión! No hemos parado en estos dos últimos días, ni los chicos ni nosotras.
El sábado por la mañana estuvieron haciendo actividades con unos voluntarios de fuera de la Fundación, donde iban pasando por diferentes pruebas para conseguir puntos y obtener un regalo.
Mientras, nosotras estuvimos preparando la actividad de por la tarde. ¡Ese día tocó tarde de cine con poporopos! Durante  un rato bastante largo estuvimos haciendo palomitas para todos los chicos, con ayuda de algunos de ellos.
Son muy colaborativos estos niños, y no nos podemos quejar de la ayuda que nos ofrecen, sin ellos tardaríamos muchísimo más. ¡Muchas gracias chicos!
Por el tiempo no se pudo completar la actividad ya que tuvieron que cenar pronto para ir a ver el partido al que les habían invitado los propios jugadores del Huehueteco.
Nosotras nos dividimos, una acompañó a los chicos al partido y la otra se quedó preparando la cena para cuando volviesen del partido cenar corriendo e irnos de fiesta para conocer la noche guatemalteca.
Del partido decir que había un ambientazo ¡increíble! Algunas incluso nos hemos hecho forofas del equipo, aunque debemos decir que tiran más alto que Sergio Ramos.
Y como hemos adelantado, el sábado por la noche nos fuimos de fiesta a bailar con Mireia, Danilo, Magda y algunos amigos más. La discoteca la verdad que poco tiene que ver con las de la noche madrileña; estaba casi vacía, nos podíamos sentar y la pista para bailar daba gusto, sin gente dando empujones. ¡Lo pasamos genial!
Y para los que se preocupan por nuestra seguridad, para tranquilizaros os queremos comentar una cosa que no nos había pasado nunca en Madrid. Antes de entrar al local nos cachearon a todos para la seguridad, y a mitad de la noche accedió al local la policía chapina para ver que todo estaba bien. Fueron unas situaciones bastante extrañas para nosotras, pero son de agradecer ya que nos sentimos muchos más seguras y pudimos disfrutar de la noche y la compañía sin preocupaciones.

El domingo a pesar de todo el cansancio de la noche anterior, nos fuimos con los niños al río para pasar unas horas como buenos domingueros.
No fuimos todos, ya que algunos se quedaron viendo el clásico y a las niñas no las dejaron ir por ese problema que a casi todos nos asola de pequeños…los queridos piojos. Las pobres en vez de disfrutar del día acabaron llorando por los cortes de pelo que las hicieron.
Los que sí fueron se lo pasaron en grande haciendo presas, tirándose barro y nadando en las zonas más profundas. ¡Alguno incluso de lo agusto que se sentía decidió quedarse igual que como nació!
Y nosotras, para no mentir, también nos lo pasamos muy bien, aunque cuando llegamos a la Fundación solo pensábamos en descansar e irnos a dormir.















Ya del todo descansadas, el lunes comenzamos la semana preparadas para hacer frente a lo que ésta nos espera.
Y lo hicimos repartiendo tareas y papeles entre los que se ofrecieron, para la obra de teatro que representarán nuestros chicos el próximo 5 de abril. Ya han comenzado el guión y parece que va a ser una obra cuanto menos curiosa…solo os adelantaremos que tiene de fondo la historia de Romeo y Julieta ambientada en Bajoterra.
El día de ayer también lo dedicamos a preparan el guión ya que nos tenemos que dar algo de prisa para que la obra de teatro salga adelante porque ¡se estrena el 5 de abril!

Os seguiremos informando de las novedades.

¡Un saludo cuates!